Se reunieron para intercambiar información sobre las necesidades de las granjas canarias y de las propuestas de gestión política para el sector
2021 ha colocado a los ganaderos contra las cuerdas por el incremento del coste de la alimentación y la crisis derivada del COVID-19
Santa Cruz de Tenerife.- Grupo Capisa y la comisión sectorial de Agricultura, Ganadería y Pesca del PP de Tenerife coinciden en que es necesario un paquete de ayudas urgentes a corto plazo y una mejor planificación estratégica de la ganadería canaria para superar la actual crisis que puede llevar, en breve, al cierre de una parte importante de las granjas de las islas.
El incremento del coste de los alimentos para los animales -en torno a un 40 por ciento en lo que va de año- y del resto de los insumos (como la luz, los materiales o equipamientos ganaderos) son algunos de los detonantes internos de esta situación.
Otros, como la política comercial de la gran distribución -que no permite subidas a los ganaderos mientras en algunos casos los productos se venden cuatro o cinco veces por encima de lo que se paga al productor- están sellando el destino de esta actividad.
Por si fuera poco, la caída de ventas motivada por la crisis del COVID-19 ha tocado, también, los ingresos sin que se vean afectados los costes de producción: los animales comen y necesitan cuidados cada día.
Ayudas puntuales
El Gobierno autonómico anuncia ayudas puntuales cifradas en unos nueve millones de euros y señala que podrán hacerse efectivas a comienzos de 2022. Mientras, desde el punto de vista financiero, las explotaciones penden de un hilo, con altos niveles de endeudamiento y baja o nula rentabilidad debido a los gastos corrientes.
Estas y otra reflexiones, se realizaron en el marco de un encuentro celebrado recientemente en las instalaciones de Graneros de Tenerife al que asistieron, por parte del PP, el presidente de la Comisión, Valentín González Évora; el diputado regional y miembro de la Comisión de Agricultura, Juan Manuel García Casañas; el portavoz del PP en el Ayuntamiento de La Laguna, Manolo Gómez, y el secretario del Comité local de La Laguna, Jacob Afonso.
En representación de Grupo Capisa, estuvieron el consejero y miembro de una de las familias fundadoras, Modesto Campos, y el director general de la entidad, Samuel Marrero. Posteriormente, todos los asistentes realizaron una visita a la nueva fábrica de Graneros.
Actividad estratégica
Los representantes de Grupo Capisa abogaron porque la ganadería sea considerada una actividad económica estratégica en Canarias. Modesto Campos dijo que, en esa línea, hay un amplio abanico de propuestas que analizar y sobre las que tomar determinaciones. Destacó la posibilidad de “promover que de forma obligatoria las grandes superficies en Canarias tuvieran que comercializar un porcentaje suficiente de productos kilómetro cero. Es que si no -agregó- vamos a acabar en manos de cuatro multinacionales y todo entrará por el muelle”, dijo.
Según Campos, los consumidores demandan carne, leche o huevos de aquí y sería una forma de obligar a incrementar las producciones locales. “Tiene toda la lógica, porque nosotros nos comportamos como un continente y es imprescindible que tengamos agricultura y ganadería”. Así, puso como ejemplo de autoconsumo otros lugares europeos como la isla de Cerdeña, “donde gran parte de lo que se comercializa es de allí”, aseguró.
El portavoz popular en el Ayuntamiento de La Laguna, Manolo Gómez señaló, que “hay un mercado de más de un millón de bandejas de carne comercializadas al mes en los supermercados de las islas y muchas empresas cárnicas importantes están establecidas aquí”. En su opinión, el problema no es de demanda sino que está “en las pegas y trabas que tiene montar una ganadería y lo que eso conlleva para poder mantener un suministro constante” a las grandes superficies y supermercados.
Burocracia
Así, abogaron por adoptar nuevas políticas para desburocratizar la tramitación de permisos y ampliaciones, o proteger legalmente la actividad ganadera. Además -dijeron- “es esencial que los planeamientos insulares cuenten con dotaciones de suelo para granjas y una planificación a nivel insular de la gestión de residuos ganaderos”.
En este sentido, Samuel Marrero, dijo que “ningún ganadero en Canarias tiene capacidad para gestionar los desechos de las granjas conforme a la actual legislación”.
En este punto concreto, hubo coincidencia general en que, como ocurre con otras clases de residuos, es obligación de las autoridades insulares (que son las que tienen la potestad sobre el territorio) arbitrar planes e invertir contando con el sector.
Señalaron que son necesarias plantas de tratamiento, gestión y revalorización, con el objetivo, no sólo de tratar los desechos, sino de reciclarlos en el mayor porcentaje posible, pensando en la economía circular, claramente recogida en la futura Política Agraria Común (PAC) de la UE.
El presidente de la comisión sectorial, Valentín Évora, señaló que todos estos problemas están afectando no sólo a las empresas ganaderas medianas o grandes, sino también al pequeño productor y señaló que eran necesarias soluciones para romper esta situación, entre ellas promover cambios legislativos y en la normativa insular.
Planificación estratégica
El diputado autonómico Juan Manuel García Casañas se lamentó de que no existiera una planificación estratégica a nivel regional que aclarara el panorama y sirviera para dinamizar esta actividad sobre unas bases comunes.
Los temas importantes estarían relacionados no sólo con los insumos, sino con la gestión de permisos y autorizaciones, residuos ganaderos, la aplicación de las políticas europeas y la planificación estratégica. Sobre esto, se planteó la necesidad de recuperar la compensación al transporte de insumos desde la Península, ya que se ha impuesto un criterio este año de que esa compensación es incompatible con el REA.
Samuel Marrero señaló que en su opinión el REA no compensa totalmente el transporte, sino sólo en una parte, y se está viendo que esa compensación es hoy especialmente necesaria.
En esa línea, puso encima de la mesa las principales cifras que afectan actualmente a los ganaderos. Explicó que “no parece que el precio de las materias primas de los piensos vayan a bajar en un futuro próximo. “Más bien todo lo contrario”, añadió.
Marrero argumentó sobre esto que “ya lo estamos viendo en las cosechas que empezarán a comercializarse en los próximos meses. A nosotros y todos los que nos dedicamos a la alimentación animal -dijo- nos está haciendo también un gran daño, ya hemos tenido que asumir un alto porcentaje de las subidas, porque sabemos que los ganaderos no pueden pagarlas, aunque nosotros tengamos que hacerlo a los cosecheros”, aseguró.
“Estamos dispuestos a asumir el papel de malos en este tema, porque somos los que vendemos los alimentos a los ganaderos, va en el sueldo, pero la realidad es que para sobrevivir dependemos de que los ganaderos estén bien”, concluyó.
Los representantes del PP coincidieron en seguir manteniendo encuentros periódicos con los representantes del sector ganadero para avanzar en las soluciones a los principales problemas: permisos, gestión de residuos, mataderos o la evolución de las ayudas y compensaciones como el REA.